sábado, diciembre 03, 2011

soñar -desordenadamente- otra forma de amar

desaprender nuestros “propios” deseos, aquello que culturalmente aprendemos a desear, es una especie de tarea muy larga pero fundamental.


no quiero tenerte.

quiero besarte, sí,
pero no quiero que seas mía.
no quiero ser sólo para vos.

quiero besarte después de hacerte reír
pero no quiero que te rías sólo conmigo,
quiero acariciarte sin miedo
pero no quiero que tengas miedo de acariciar a otrx.

¿porqué?
¿por qué no optar por amar una y otra vez
a esa persona que te encanta (en este momento presente)
por el módico precio de no amar a nadie más así
(con esa intensidad y esa cantidad de sexo semanal)?

¿porqué?
por que me gusta pensar que es tiempo de cambiar.
¿novixs?
no, amigxs.

cuidarnos, siempre.

pero no te creo que va a ser para-siempre,
porque no quiero que sea para-siempre.


eterno lo efímero,


pero no quiero que lo efímero sea eterno...
porque no lo soporto.


te quiero ofrecer éste rato que todavía soporto,
abrazarte y mirarte dormir,
sí, que duermas tranquilo.


¿cómo te voy a pedir que no seas libre,
si lo que más me gusta de vos es tu libertad?


y guerrear.
de frente, y sin medias tintas.
con las miradas de lxs que no se animan.
con los comentarios de lxs que juzgan.
con los consejos de lxs que todavía no sueñan.
y con mis miedos,
mis celos,
los tuyos,
nuestra paranoia.

y guerrear
para poder amar más y más,
y vos a ella,
y ella a ella,
y ella a él,
y él a él,
y él a mi
(que soy nena).
ensanchar el alma.

probar orgasmos de toda la tierra,
sexo de todos los colores,
lágrimas de distintos géneros.
sexo, luego amigxs.
amigxs, luego sexo.

ay, cómo me gustás, nena.
ay, cómo me gustás, nene.
ay, cómo me gusta que me guste alguien.
otra vez.
y otra vez.
y otra vez.


dale, abrazame fuerte.
antes de que sea tarde.
(canción insoportablemente monogámica utilizada
como repeat-colchón para que la mente se exprese)



No hay comentarios.: